Reinventar la guerra


 
por dejarme llevar en la ciudadinfame y asolada nadie ¿nadie? ha tomado la decisión de retirarse el barro delos oídos en la pereza de reinventar la guerra otra guerra de la misma maneraque la urraca recoge las chapas de la playa por dejarme llevar la gaviota dejacaer una cabeza de paloma recién separada del cuerpo que va a dar entre elbalancín y el tobogán del minúsculo parque infantil vallado donde también duerme elmendigo de la cara quemada nadie ¿nadie? se arranca los ojos todavía por dejarse llevaren la pereza de reinventar la guerra de un tajo las manos golpeando la cabezacontra el borde de la estaca del parque infantil de mierda